lunes, 25 de julio de 2011

una buena razón

escribir se me está dando mal y poco. No siempre ha sido así, he tenido momentos de gran producción escrita, aunque principalmente siempre se trata de cosas malas, pero al menos producía. No sé qué me tiene tan poco prolífera, parece que no me equivocaba tanto cuando les decía a mis alumnos que cuando uno es realmente feliz no tiene ganas de sentarse a escribir, sino más bien tienes ganas de disfrutar al máximo de esa felicidad que lo ocupa todo.

1 comentario:

  1. ¡Qué grata noticia! hija mía.La felicidad también es una buena musa de inspiración, lo que pasa es que te obsorve como una esponjita de aroma a campo puro después de la copiosa lluvia.

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